Espero que les haya sido de bendición la columna anterior y me alegro de estar en contacto nuevamente con ustedes.
La vez pasada comenzamos hablando de LA GRATITUD y hoy continuamos con LA LEALTAD. ¿Quién puede creer que es líder si dentro de sus cualidades personales no está la lealtad hacia otros?
¿Se imagina usted qué ejemplo podemos dar a los que nos están siguiendo (de eso se trata ser líder) si ellos no pueden ver en nosotros lealtad? Hoy encontramos dentro de las organizaciones un montón de personas en posiciones de liderazgo quejándose de la falta de lealtad en sus propios equipos de trabajo. Pero ¿ellos qué han visto como modelo en nosotros? ¿Qué ejemplo hemos modelado en sus vidas con nuestro comportamiento? ¿Cuál ha sido nuestra actitud con quienes nos precedieron?
Este no es un punto menor. Realmente es de vital importancia para que no falle nuestro liderazgo. ¿Con qué autoridad podríamos corregir situaciones de deslealtad cuando no hemos modelado en nuestros equipos esta virtud?
Como me gusta la exhortación del Apóstol Pablo cuando hablando de quienes nos guían y amonestan en el Señor (o sea, nuestros líderes), nos dice “ténganlos en alta estima”.
La lealtad es imprescindible. La lealtad hace que miremos hacia arriba y veamos quien nos dio la mano para llegar hasta dónde estamos y a pesar de haber llegado alto, no creer que fue solo por nuestro mérito y que los demás no han tenido nada que ver. ¡Gracias a Dios por todos aquellos que tomaron tiempo en su vida para ayudarme a estar donde estoy hoy!
La lealtad en un sentido está bien pegada al agradecimiento. Por ejemplo, no modelamos en nuestro equipo la virtud de la lealtad, cuando los que nos dieron la mano en otro tiempo hoy están pasando necesidad y nosotros nos hacemos los de “la vista gorda” “miramos para otro lado” o pensamos “es un trato de Dios para esa vida”.
Me da mucha pena ver “siervos de Dios” con las arcas llenas mientras que sus mentores están pasando necesidad. No es un modelo de Reino. No es un modelo a seguir. Me parece absurdo que aquellos que nos han ayudado a llegar a donde estamos hoy estén pasando necesidades cuando a nosotros nos está yendo de lo mejor.
Si nos va bien a nosotros, nuestro bienestar tiene que conllevar bienestar también para ellos. Es exactamente igual a lo que ocurre dentro de una familia. Ese, creo, es el modelo de Dios y, por consiguiente, es el modelo que Dios quiere que nosotros modelemos.
La lealtad en un sentido está bien pegada al agradecimiento, puntos de vital importancia para que no falle el liderazgo de cada quien. ¿Cuántos de nosotros hemos fallado en esto?
¿Cuántos de nosotros hemos fallado en esto? Si por alguna razón lo hemos hecho, tenemos un buen motivo para cambiar de rumbo y restituir. Recuerda que siempre es buen momento para corregir.
@PastorEstebanF
Director del Ministerio Latino de Biblica, y presidente del ministerio de capacitación a líderes “Nuestra Fortaleza”.
Por favor escríbeme a esteban.fernandez@biblica.com Será un gusto conocerte.
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Pastor buenos días tuve el honor de conocerle en el congreso de comunicadores cristianos en Pachuca México, soy pastor de la iglesia Alianza con Dios con un año de vida en el poder del Espíritu Santo me gustaría saber si usted tiene planes de estudio o cursos, considero q sus palabras y estudios están muy bien aplicados en la Palabra del Señor y me gustaría mucho q pudiera apoyarnos